Celulitis orbitaria: qué es, causas, síntomas, tratamientos y diferencias entre la preseptal y la periorbitaria

La celulitis orbitaria, es otro de los tipos de celulitis que requieren un diagnóstico prematuro para poder controlar sus efectos y evitar problemas posteriores.

Este tipo de padecimiento afecta a los párpados y es ocasionada por bacterias en el área y no está relacionada con los otros tipos de celulitis conocidas

También se denomina preseptal o periorbitaria y entre sus síntomas más comunes está la fiebre, el enrojecimiento e inflamación del párpado y zonas aledañas.

Es más frecuente en niños que en adultos y no es una patología grave siempre que se detecte a tiempo.

¿Qué es la celulitis orbitaria?

Es una infección repentina en los tejidos cercanos a los ojos, que puede afectar párpados, cejas y mejillas, y que si no es tratada a tiempo puede causar problemas severos y prolongados, incluso de gran gravedad como la ceguera.

Por ello el diagnostico prematuro es de vital importancia y requiere una serie de estudios médicos, entre los que se incluyen:

• Conteo sanguíneo completo y en algunos casos punción raquídea,
• Radiografía de los senos paranasales,
• Tomografía computarizada o resonancia magnética,
• Cultivo del ojo, de la nariz o incluso exudado faríngeo

Todos ellos se realizan con el fin de permitir la detección a tiempo para garantizar la recuperación.

¿Cuál es la causa de la celulitis en los ojos?

El origen de esta enfermedad es una infección bacteriana, producida Haemophilus influenzae, Staphylococcus aureus, Streptococcus pneumonie y los estreptococos betahemolíticos, que se presenta con frecuencia en niños, principalmente los menores de siete años, aunque también puede afectar a adultos.

También puede producirse a raíz de lesiones en la piel, raspones, orzuelos o picaduras de insectos en la zona que rodea el ojo, que sirven de puerta para que las bacterias ingresen en la herida produciendo la infección.

Los patógenos causantes de esta enfermedad varían de acuerdo a la etiología y a la edad del paciente.

El Streptococcus pneumoniae está considerado como el germen más frecuente en los casos relacionados con la sinusitis, mientras que el Staphylococcus aureus y el S. pyogenes provienen de infecciones secundarias a traumatismos locales.

¿Cuáles son los síntomas de la celulitis orbitaria?

Entre los síntomas más comunes de este padecimiento está la inflamación en los párpados (cejas principalmente) aunque también puede extenderse hasta las mejillas.

Si no se atiende a tiempo puede producir una disminución de la visión, ceguera parcial, dolor ocular, fiebre y sensación de cansancio y malestar general, así como dificultad par amover los ojos, coloración roja o púrpura en el parpado, apariencia de ojos saltones y en el peor de los casos, ceguera total.

Si presenta alguno de estos síntomas, especialmente fiebre, debes acudir inmediatamente al médico ya que se trata de una emergencia que requiere ser tratada de manera oportuna para evitar complicaciones.

¿Cómo se diagnostica la celulitis orbitaria?

El diagnóstico de esta patología es realizada por un médico oftalmólogo quien mediante evaluación clínica y exámenes de laboratorio determina las posibles causas de la enfermedad, descartando heridas en la zona, picaduras o patologías asociadas, diagnosticando el tipo preseptal o periorbitaria.

Si los hallazgos no son claros, o la exploración es difícil, particularmente en niños pequeños, o si existen síntomas de otras patologías, es posible que se requiera someterse una tomografía computarizada o una resonancia magnética para descartar la enfermedad.

Otro parámetro utilizado por los especialistas es la dirección del exoftalmos que puede ser un indicativo del foco de la infección.

Lo anterior se deriva de que es habitual que la extensión desde el seno frontal produzca el desplazamiento del globo ocular hacia abajo y afuera, mientras que la extensión desde los senos etmoidales desplaza el globo de manera lateral y hacia la parte exterior.

Asimismo, es posible que se indiquen hemocultivos antes de iniciar cualquier tratamiento con antibióticos, a pesar de que solo son positivos aproximadamente menos de un 33%. Ante la sospecha de meningitis se puede realizar una punción lumbar.

Si se sospecha meningitis, se realiza una punción lumbar.

Por otra parte, si la sospecha se centra en la zona sinusal, se realizan cultivos del líquido de los senos paranasales. No son particularmente útiles otras pruebas de laboratorio.

¿Cuál es el tratamiento de la celulitis orbitaria?

Generalmente esta patología requiere hospitalización ya que el tratamiento incluye antibióticos por vía intravenosa que debe realizarse en un centro médico.

Incluso es posible, dependiendo de la gravedad, que sea necesario practicar una cirugía a fin de drenar los líquidos y el acceso, para aliviar la tensión alrededor del ojo.

Por otra parte, debido a que la infección puede extenderse y empeorarse en pocas horas, es necesario que se mantenga al paciente en observación periódica para evitar que avance mediante un tratamiento adecuado, evitando la ceguera permanente.

En cuanto al tratamiento en niños con este padecimiento, generalmente puede ser manejado de manera ambulatoria, con antibióticos suministrados por vía oral y controlándose periódicamente, particularmente si es de leve a moderada, ya que reacciona favorablemente con dosis altas de amoxicilina-clavulánico.

Solo en casos extremos, en que el paciente no responda a los antibióticos orales, se requiere la internación del menor para la observación hospitalaria y el tratamiento intravenoso.

La patología de tipo orbitaria requiere actuar de manera rápida, suministrando tratamiento antibiótico intravenoso, en atención a las severas y fatales complicaciones que puedan surgir.

Usualmente se utilizan antibióticos como la vancomicina, asociada con otros para una mayor efectividad.

En el caso de pacientes alérgicos a la penicilina, la vancomicina en combinación con una fluorquinolona es la opción más acertada.

El tratamiento suele realizarse por un mínimo de una semana por vía intravenosa, para continuar el tratamiento por vía oral hasta por tres semanas, dependiendo del caso.

La última opción en cuanto a tratamientos para esta patología está la intervención quirúrgica.

Sin embargo, es motivo de continuos debates y solo se realizan en caso de extremos por la dimensión de los accesos o proptosis o si hay presencia de gas en la órbita, infección dental o si el absceso no está en localización medial.

De todas formas, con el tratamiento oportuno el paciente puede recuperarse por completo.

En caso contrario puede presentarse complicaciones de pérdida de visión por retinopatía y neuropatía óptica isquémica por el incremento de la presión intraorbitaria.

También restricción de los movimientos oculares, secuelas intracraneanas, trombosis del seno cavernoso, hipoacusia, septicemia o meningitis.

¿Cuáles son las diferencias entre la celulitis preseptal y la periorbitaria?

Si bien ambos padecimientos son causados por la acción de un agente externo de infección y sus signos y síntomas clínicos son similares, son dos enfermedades distintas.

La diferencia fundamental es que la preseptal suele a comenzar delante del tabique orbitario, mientras que la periorbitaria se inicia por la parte posterior. Ambas patologías son más frecuentes en niños, siendo la preseptal mucho más común que la periorbitaria.

La prevención es la clave para evitar complicaciones mayores, que van desde afectaciones a su estado de salud como a su estética.

Por ello, si se presenta alguno de los síntomas acuda de inmediato al médico especialista, evite disimularlas o taparlas ya que ignorar la celulitis orbitaria puede causar daños irreparables, por ello tome en cuenta las recomendaciones y evite poner en riesgo su salud.