¿Cómo hay que usar los champús sin sulfatos? Cierto es que este tipo de champú suele limpiar y la vez, cuidar nuestro cabello, pero si estamos acostumbrado a los champús con sulfatos debemos saber que hay algunas diferencias en el lavado con los champús sin sulfatos. No os preocupéis, porque os lo explicamos a continuación, con todo detalle.
Cómo usar un champú sin sulfatos
Los sulfatos son surfactantes tensioactivos que al reaccionar con el agua, hacen que se forme una cantidad abundante de espuma, responsable de la eliminación de toda la suciedad y grasa en nuestro pelo. Es por ello que siguen siendo de los champús más usados en todo el mundo. Además, los sulfatos son baratos, por lo que ¿quién se puede resistir a un champú que no solo te lava el pelo sino que además apenas cuesta unos euros? Lo cierto es que durante años hemos lavado el pelo pensando que la espuma es lo único que nos ayuda a eliminar la suciedad, y aunque en parte esto es cierto, también es verdad que los sulfatos hacen que nuestro cuero cabelludo se vaya quedando sin sebo.
La falta de sebo en nuestro pelo provoca el encrespamiento del que se quejan muchas personas, así como la fragilidad del pelo, e incluso en algunos casos, que aparezca irritación. ¿Qué podemos hacer entonces? Pues por suerte para nosotros tenemos por fin en el mercado una amplia variedad de champús sin sulfatos entre los que elegir, aunque debes saber seguir correctamente todos los pasos de uso y con ello, podrás lavar tu pelo y además cuidarlo para que se recupere de cualquier efecto nocivo que hayan tenido los sulfatos sobre nuestro cuero cabelludo.
Veamos ahora paso a paso, cómo usar un champú sin sulfatos:
- Lo primero que tenemos que hacer antes de comenzar a usar un champú sin sulfatos, es tener en cuenta que puede hacer menos espuma que un champú convencional. Aunque en algunos nuevos champús sin sulfatos ya existen fórmulas que generan bastante espuma y no hay tanta diferencia con los champús de siempre.
- Si usas un champú sin sulfatos que genera poca espuma no debes preocuparte, la clave está en mojar bien el cabello, solo así conseguirás que el champú se pueda extender correctamente a través de toda la longitud de tu cabello, Primero mojas bien y luego, aplicas un poco de champú sobre el cuero cabelludo dando un ligero masaje pero sin frotar demasiado.
- Una vez hayas acabado de masajear el cuero cabelludo, debes volver a mojar las longitudes o mechones de tu cabello, y aplicas un poco más de champú lavando como sueles hacer siempre.
- A continuación, y ahí está otra de las claves en el uso del champú sin sulfatos, debes dejar que el champú repose en el pelo durante al menos tres minutos (puedes hacer esto mientras te acabas de duchar). De este modo, conseguirás que el champú ejerza su función reparadora sobre el cabello, cerrando los folículos pilosos de modo que se puedan recuperar y ayudando además a que el cuero cabelludo comience de nuevo a generar el sebo protector que necesita nuestro pelo.
- Por último, tan solo nos quedará retirar los restos de champú. Para ello debes enjuagar bien el pelo, e incluso hacerlo dos veces. De este moto te asegurarás que habrás eliminado todo el producto algo que puede que al comienzo te cueste un poco, pero enseguida vas a ver como el pelo te queda más limpio y se ve más cuidado, de modo que significará que ya sabes cómo usar este tipo de champú. También te recomendamos fijarte en los champús sin sulfatos cuyas fórmulas aseguran no dejar restos porque son mucho más fáciles de aclarar.
Cuándo usar un champú sin sulfatos
Ya hemos visto de qué modo podemos usar el champú sin sulfatos de forma correcta, pero no estará de más saber qué existen determinados casos en los que es conveniente utilizar este tipo de champús. Por ejemplo:
Cuándo notes tu cabello debilitado o con irritación en el cuero cabelludo
En el caso de que notes tu cabello frágil, reseco o encrespado, o también estés sufriendo irritación y picazón en el cuero cabelludo, es porque estás sufriendo los efectos nocivos que tienen los sulfatos en el pelo. En este sentido, debes pasarte a los champús sin sulfatos, para comprobar como la irritación desaparecerá casi de inmediato, y poco a poco notarás como el pelo recupera su calidad y desaparece el encrespamiento. (Ver también Ventajas y desventajas de los champús sin sulfatos)
Cuando quieras tener un pelo bonito a largo plazo
En primer lugar y tal y como hemos comentado, la adopción de un tratamiento sin sulfatos ayuda a calmar el cuero cabelludo. Estos componentes lo irritan: de modo que para defenderse, el cuero cabelludo crea más sebo. Como resultado, tu cabello se engrasa más rápido. En definitiva, un producto suave y sin sulfatos limpiará tu cabello respetando el cuero cabelludo, para un cabello más sano.
También recuerda prohibir las siliconas del cuidado de tu pelo, porque también son malas. Si aparentemente dejan el cabello enfundado y sedoso, la realidad es bastante diferente porque sofocan la fibra y la debilitan desde el interior.
Cuando quieras un color más brillante
El uso de un champú sin sulfatos, también ayudará a suavizar la fibra capilar y a mantener tu cabello brillante . Si además te has teñido el pelo, los champús sin sulfatos son tus aliados, porque ayudará a que tu pelo conserve el color durante más tiempo.
Cuando quieras mantener el alisado brasileño
Si bien se recomiendan los champús sin sulfatos para cabello normal, así como para cabello teñido, estos también son necesarios en caso de alisado brasileño. De hecho, el alisado brasileño es un tratamiento a base de queratina , a diferencia de otros alisados como el alisado japonés que se basa en proteínas de seda.
Dado que el sulfato ataca la queratina, la única forma de preservar la suavidad brasileña es evitar el champú que contenga sulfato . Un champú sin sulfato mantendrá los efectos del alisado brasileño y mantendrá el alisado por más tiempo.