Tipos de celulitis, características y soluciones

Los tipos de celulitis que existen poseen características distintas y su tratamiento ha de aplicarse de forma adecuada. En esta guía, repasamos las formas de tratarlas.

Pero primero, veamos una puntualización rápida acerca de cómo puede presentarse este tipo de grasa en nuestro cuerpo.

Tipos de grasa

Existen dos tipos de grasa en nuestra piel, es decir, tejido adiposo. Cada una cumple una función biológica en nuestro cuerpo, sin embargo, una de ellas es la encargada de generar la celulitis.

Grasa Parda

Este el tejido adiposo es parte de nuestra historia genética, ya que los mamíferos en su mayoría cuentan con ella. Este tejido se activa cuando sentimos frío y genera calor para que mantengamos la temperatura corporal adecuada.

Grasa Blanca

Al igual que la grasa parda, la grasa blanca es propia de los mamíferos, pero contrario a generar calor, es una reserva energética que nuestros antepasados usaban para soportar los duros inviernos.

Actualmente, esta acumulación de grasa en el cuerpo es la responsable de la celulitis y los muy conocidos michelines.

Tipos de celulitis

Antes de especificar los tipos de celulitis que existen, es importante que conozcas las zonas del cuerpo donde esta aparece, para que de esta forma puedas identificar el tratamiento más adecuado para cada caso.

• Las caderas y los muslos son las zonas donde se identifican con mayor frecuencia y facilidad las lesiones de la celulitis
• Las rodillas, en su parte interna, recubriendo la rótula
• Los tobillos en forma abultada
• La nuca dando el aspecto de joroba

Según la zona, aparece una forma de celulitis. Principalmente se identifican tres tipos:

Blanda

Es el tipo de celulitis más común, cuyo rasgo principal es la flacidez y aspecto gelatinoso de la piel. Se identifica ya que, al tocar a zona, esta se hunde dando forma de la piel de naranja.

Este tipo de celulitis no es dolorosa y aparece generalmente en los glúteos y muslos.

Las mujeres suelen presentar esta lesión entre los 30 y 40 años en los brazos y muslos, acompañada de sensación de pesadez en el cuerpo en dicha zona.

Este tipo de celulitis es común debido la carencia de ejercicio físico en quienes la padecen y según el grado de avance de la celulitis, se realiza un tratamiento intensivo para adelgazar.

• Tratamiento: Se realizan masajes para mejorar la circulación y mover la grasa localizada. Se acompañan los masajes con radiofrecuencia.

Cuando el caso es avanzado se aplica presoterapia, es decir, la estimulación para el drenaje linfático.

Se recomienda, para evitar la aparición de este tipo de celulitis, los ejercicios aeróbicos y de tonificación, acompañada con una dieta rica en proteína. El éxito del tratamiento es drenar y eliminar la grasa.

Dura (compacta)

Contrario a los síntomas de la celulitis blanda, la piel en esto casos se vuelve más rígiza y genera molestias físicas y dolencias, ya que aumenta la sensibilidad cutánea.

Al ser una lesión generada por la reserva de grasa de la piel, puede presentar sensaciones de calor y frío en la zona que ha sido afectada.

Este tipo de celulitis se puede identificar porque la piel se siente como un bloque compacto que dada su dureza puede romper los tejidos y provocar estrías.

Ocurre por una alimentación inadecuada, acompañada de grasas saturadas y altas calorías. Suele aparecer en la adolescencia y si no es tratada correctamente y a tiempo, permanece en el paso del tiempo.

• Tratamiento: Se aplica igualmente un tratamiento con masajes anticelulíticos por medio de la vacumterapia, un tratamiento de origen francés, qué succionando la piel, rompe los depósitos de grasa. Se refuerza con radiofrecuencia.

Según el caso, es necesaria la mesoterapia, es decir la inyección de líquidos en zonas específicas para facilitar la disolución de la grasa.

Se recomienda, para evitar este tipo de celulitis, llevar una dieta adecuada. Igualmente, en los casos más complicados, consultar con un médico, dado que algunas personas tienen propensión genética y hormonal a su aparición.

Edematosa

La celulitis Edematosa presenta las características de la celulitis banda y la celulitis dura. Se visualiza en las extremidades inferiores, de forma que las piernas se hinchan hasta que su aspecto es totalmente recto, rígido y con presencia de nódulos. Puede ser dolorosa al tacto.

Este tipo de celulitis es el menos frecuente y su tratamiento es muy complejo. Aparece en mujeres de 20 a 30 años.

• Tratamiento: Consiste esencialmente en la eliminación de líquidos por medio del drenaje linfático, preferiblemente de forma manual.

Se recomienda para que el tratamiento sea efectivo, llevar una dieta baja en sal, sin grasas saturadas y alimentos que promuevan el drenaje del cuerpo, también conocidos como “détox”. Igualmente, alimentos venotonicos, es decir aquellos que favorezcan la circulación sanguínea.

Grados para medir los tipos de celulitis

En el campo estético se han determinado 4 grados para medir la celulitis:

• Grado I: No es visible y para identificarlo debe apretarse fuertemente la zona para percibir la lesión
• Grado II: Se percibe la celulitis apretando levemente la zona
• Grado III: A simple vista se reconoce que hay celulitis sin apretar la zona
• Grado IV: Siendo el mayor grado, puede ser incluso doloroso. Presenta retención de líquidos y edemas.

Otros tipos de celulitis

A continuación, os presentamos otros 5 tipos de celulitis que pueden llegar a ser un problema más allá de lo estético y que requieren suma atención.

Facial y Facial Odontógena

Se presenta como una hinchazón de las capas internas de la piel, provocada por bacterias. Su tratamiento debe ser inmediato y no basta con dietas anticeluiticas. La falta de tratamiento puede causar graves problemas de salud.

La celulitis facial puede ocurrir por la exposición de una herida de la cara a bacterias staphylococcuso y streptococcus.

En el caso de la celulitis facial odontógena, sus causas pueden derivarse de caries sin tratamiento que producen una cantidad excesiva de staphylococcuso y streptococcus. Si se permite avanzar la infección, esta bacteria se traslada a la cara por el torrente sanguíneo, pudiendo afectar las vías respiratorias.

Su tratamiento es por medio de antibióticos vía intravenoso y no exposición a la luz en el área afectada.

Infecciosa o bacteriana

Este tipo de celulitis ocurre cuando las bacterias entran en la piel e infectan las capas cutáneas más profundas. Debido a esto aparece un intenso enrojecimiento en la piel que en ocasiones presenta secreción, dolor, fiebre e inflamación.

Es una enfermedad que al no ser tratada adecuadamente y a tiempo puede llegar a generar una infección generalizada en el organismo y en el peor de los casos, la muerte, pues algún órgano vital puede verse comprometido.

Ante cualquier tipo de infección en la piel, debe acudirse inmediatamente al médico para que se suministren antibióticos que ataquen las bacterias.

Al igual que en la celulitis facial, la celulitis infecciosa ocurre por la penetración de las bacterias staphylococcuso y streptococcus por medio de una herida cutánea.

Por tal razón, las personas más propensas a padecer esta enfermedad son aquellas que tienen heridas quirúrgicas o cortes no tratados correctamente.

Periobitaria

Este tipo de celulitis, es muy común en niños menores de 18 meses, sin embargo, puede aparecer en cualquier momento de la vida.

Ocurre principalmente por una pequeña lesión o picadura de insecto alrededor del ojo que es infectada por bacterias. Debe ser tratada a tiempo, ya que podría llegar a extenderse hasta los senos paranasales.

Su tratamiento es por medio de antibióticos orales o vía intravenosos.

Orbitaria y preseptal

La celulitis orbitaria es una infección de la grasa y los músculos que rodean el ojo. Esta lesión afecta desde las cejas hasta la mejilla.

La enfermedad puede empeorar gradualmente si no se da un tratamiento adecuado e incluso puede causar problemas a largo plazo como la ceguera.

Suele ser una enfermedad más común en niños de 7 años que comienza con una infección en los senos paranasales. Sin embargo, gracias a una vacuna que previene el contraer este tipo de enfermedad, cada vez es menos frecuente.

Es necesario internar a la persona que padece la enfermedad y aplicarle tratamiento intravenoso. En casos muy avanzados debe drenarse el absceso de grasa.

Como habrás podido observar a lo largo del artículo, a la hora de eliminar la celulitis, cada tipo requiere un tratamiento específico y unas acciones determinadas. Por ello, no existe una solución global para todas, sino que puede variar en cada uno de los casos.

Recuerda que esta guía es meramente informativa pero que todo el equipo de CuidadoyEstilo nos hemos esforzado mucho en investigar para que los recursos aquí encontrados te puedan ser de la máxima ayuda posible. Acude siempre a tu médico de confianza, él podrá darte una valoración personalizada.